"Effortless Chic". Esa expresión que usan en el norte para describir algo que tiene estilo único, excelencia pero sin aspavientos es lo que puede describir aunque muy superficialmente este emprendimiento gastronómico: Noma de René Redzepi, en Copenhague.
Sin embargo, en 2as y 3as lecturas, contiene también la paradoja de ser un lugar que si bien de afuera no hace alarde de nada, más bien se funde con el entorno, e incluso adentro no tiene pretenciones más que cierta estética identificatoria nórdica, alberga uno de los laboratorios creativos y de propuestas gastronómicas más relevantes de los últimos años . Especialmente desde que cerró El Bulli de Adriá,(donde por cierto trabajo su chef principal, entre otros, como The French Laundry, etc) y dejó el cetro de los mejores restaurants internacionales, Noma lo ha adoptado con la excelencia de los que trabajan arduo, con una identidad muy marcada y con una calidad excepcional.Sin ánimos de fusiones culturales o conceptos complicados, han sabido sacarle partido a la cocina de productos del mar típica del país y llevarla a otro nivel. El protagonista dentro de esos muros son las experiencias y los sabores, el paisaje, el lugar y lo que puede leerse de la gente y el país que lo vio nacer.
Dinamarca es, mirado desde fuera, un lugar donde no hay grandes crisis, y es, junto con Suecia, casi una Disneylandia para los interesados en el diseño: hogar de Lego, Bang & Olufsen, Bjarke Ingels, Arne Jacobsen, tienen esa impronta de supremacìa cool que admiramos desde siempre.
Escondido en un antiguo almacén del siglo XVIII del puerto de Copenhague, noma es el único restaurante de Dinamarca con dos estrellas Michelin. El chef René Redzepi, su jefe de cocina, y co propietario del lugar ha cocinado en algunos de los mejores restaurantes internacionales, pero aquí no se trata de cocina fusión, sino de Nueva Cocina Nórdica. Una cocina donde se encuentran delicias escandinavas como algas islandesas, pescado feroés, buey groenlandés y acedera de los bosques daneses. Sencillamente hay que vivirlo.
El nombre Noma es un acrónimo del danés "nordisk mad", que significa "comida nórdica". La base de sus menús son ingredientes locales y representa la cocina danesa moderna. En palabras de Redzepi:
“En un esfuerzo por dar forma a nuestra manera de cocinar, miramos a nuestro paisaje y profundizar en nuestros ingredientes y la cultura, con la esperanza de redescubrir nuestra historia y nuestro futuro”
Sin divismos ni nada, uno puede entrar y que lo salude el mismísimo Redzepi en la puerta,(nombrado como una de las 100 personalidades mas influyentes por poner la comida danesa en el mapa mundial) o ande por el salón conversando con la gente. Además suele suceder que el chef que cocine el plato lo sirva, lo cual agrega una dimensión extra a la experiencia, explicando los ingredientes y como fueron preparados hasta servirlos. Si uno recorre comentarios de comensales en la red, usualmente son del tipo " La mejor experiencia gastronómica que he tenido" y ese tipo de elogios.
El local, reealizado por la firma Space Copenhagen que por cierto recomiendo visita a su web acá
Me encanta cuando esos lugares sin pretenciones y con una simpleza en la exhibicion externa, logran arrancar adjetivos interminables de admiración, atención a los detalles físicos, o del servicio, y muestran inteligencia en el oficio que los ocupa: algo así como las personas fascinantes que te sorprenden cuando las conocés sin siquiera verlas venir con ruido...
Por eso alguien describió la experiencia como darse cuenta que lal comida aveces no es solo comerla: es los sabores, la forma de prepararlo, la ambientación, la ejecución brillante y mucho más que hacen que el resultado sea mucho más que la suma de sus componentes.
Si quiere experimentar mientras sueña con almorzar allí, puede comprar el libro.
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