El Museo Triennale en Milan alberga muchisimas exposiciones simultáneas, cada una de recorrido, contenidos y valor a cada cual más interesantes... Y nada de un dos por tres metros cada una sino amplios pabellones o sectores para cada firma generando miles de recorridos por momentos abrumadores, sobedosis de diseño a la maxima potencia.
Para hacerlo gráfico, cuando me tocó visitarlo estaban expuestas (entre otras) :
_ Ross Lovegrove y su Prototipo para Renault Twin´z detallado en este post.
_ Hand made in Hangzhou detallado acá.
_ El pabellon de Puglia y empresas como Gaudio con cocinas tecnológicas , detallado aquí
_ El diseñador del bolidismo italiano Massimo Iosaghini acá.
_ Benetti yachts acá
_ Bottega Conticelli acá
_ Panerai y la fabricación de sus relojes
_ El matrimonio creativo de los Fuksas y su retrospectiva
_ Japón y texturas en piedra
_ El diseño escandinavo a través del color, que es la que nos ocupa ahora
Reunidos en varios sectores y agrupados cromáticamente, exhiben piezas tanto clásicas como contemporáneas, donde se ve como las nuevas corrientes se alimentan de sus predecesores, apuntando a un futuro más global y sustentable, siempre caracterizado por líneas puras y sobriedad de propuestas, que aunque simples en el desarrollo, son magistrales e impactantes en el resultado.
Acá va mi paseo vespertino por ese sector del museo, el cual finalizaba para alegría de los exhaustos visitantes en una terraza equipada con lo último de diseño con vistas a los jardines.
Un paréntesis con diseño de autor para descansar...de tanto diseño de autor!
Ese cilindro era un parlante revestido en fieltro e intervenido por artistas locales escandinavos...y sonaba como los dioses! |